Históricamente el tratamiento invasivo de la enfermedad vascular periférica oclusiva ha sido la cirugía de Bypass en situaciones en las cuales el nivel de isquemia era muy severo o había amenaza de la viabilidad del miembro; sin embargo, el desarrollo de técnicas de revascularización basadas en catéteres ha ampliado las indicaciones para el tratamiento invasivo y ha llevado al incremento de la utilización de las técnicas endovasculares. Actualmente se realizan un gran número de intervenciones endovasculares en el sistema vascular periférico, las cuales buscan reparar el normal flujo sanguíneo.